Vistas de página en total

miércoles, 27 de diciembre de 2017

Hablando de amores

«Amores se van marchando como las olas del mar,
amores los tienen todos pero quién los sabe cuidar. 
El amor es una barca con dos remos en el mar,
un remo aprietan mis manos
el otro lo mueve el azar.
¡Quién no escribió un poema 
huyendo de la soledad...!»
      ©Mari Trini (Amores)

¿Vivir para ver o ver para vivir? No sé, pero a mí la vida me sorprende cada día. Yo no me perdería, no lo hago, al menos lo intento y consigo mucho, ni un momento. ¡Cada día es espectacular! La verdad es que lo tengo fácil. Vivo rodeado de amor y eso ya es mucho. Pero es que son los mejores amores que pudiera soñar. Mi perro mayor es un sol; la chiquinina: Amy la cantante, ¡qué quieres que te diga! A ti se te cae la baba cuando ves a tu hija pegar esos triples saltos mortales para pillar una simple mariposa, a mí también. Y de nuestra loba, ¿qué me dices? Somos los tres idénticos, tres leones: uno en loba, otro en lobo-zorro y yo en perro-gato-lobo-zorro-águila-lagarto-búho-dragón, y no sé si me olvidaré a alguien. Fuera bromas, el amor es lo mejor del mundo, el correspondido ya es la hostia, pero todo amor es fantástico y no deja de parecerme el mayor de los milagros que éste tenga lugar. Quizás por parecerme afortunado el hecho de no morirme sin conocerlo me haga ser tan respetuoso con el amor y por tanto con las personas, o con todo lo que quiero. El amor ha de alimentarse cada día, es algo así como el traga-leños de un amigo (le llama así a la chimenea francesa que tiene en su taller), come y come y come, cuánta más leña, más calor y más quiere. El amor es vicioso, o engancha, como quieras llamarlo. Pero el amor mueve el mundo, que no se nos olvide nunca. Al amor nadie le puede poner puertas ni barreras, el amor está por encima de todo y amor triunfa siempre, qué no se te olvide. Quién lucha contra el amor más cerca está de él, pero se pierde el estar junto a él.Yo no recuerdo vivir sin amor, siempre quise todo lo que tenía; no soy de esos que necesitan perder algo para quererlo, a mí no me hace falta perder a alguien para valorarlo. Yo ya valoro lo que tengo porque sólo tengo lo que valoro. Me explico, ¿no? Yo no podría quedarme sin amor nunca, el amor va conmigo, ¡me quiero tanto! Pero tanto, tanto qué ni te imaginas. Por eso puedo querer tanto. Pero querer, también es verdad, requiere mucha ocupación, por eso yo quiero a pocas personas, no tengo capacidad para querer a más, aunque siempre se acaba por hacer un hueco cuando merece la pena. Mis amores para mí son los mejores, qué nadie me los toque, me viene a la cabeza una frase tan manida y por ello me parece desgastada y no pienso utilizarla. Mis amores son mi vida. Yo les doy vida y ellos a mí. Sólo puedo decir que su presencia no la cambio por nada. Así que gracias a mis pocos y buenos amores. Tú y ellos ya os dais por aludidos. 
¡Qué sería de mí sin mis amores!

©Miguel Je diciembre 2017

No hay comentarios:

Publicar un comentario