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viernes, 9 de enero de 2015

EL INCREIBLE SR. RAJOY





Elijo este titular porque, el adjetivo calificativo que encontré para expresar lo que quiero transmitir, no puede ser más adecuado para definir lo que, este Presidente del Gobierno, se ha atrevido a exponer en un discurso navideño, teóricamente, dirigido a la nación para felicitar a todos los españoles y digo esto de teóricamente porque sólo, supuestamente, se puede entender que así pueda ser ya que al hablar, únicamente, de su “exitosa” política económica, más de catorce millones de españoles, no sabemos a quien se pudo estar refiriendo que no fuera al reducido grupo de privilegiados que, exclusivamente, amparados en el favoritismo de un gobierno de derechas, montaraz y salvaje, han prosperado escandalosamente haciendo que sus riquezas crezcan en proporción inversa a la pobreza, generada en buena parte de una población como la española, que no acierta a entender que pueda existir en economía, una técnica política tan desastrosa que permite robar a los pobres para dárselo tan gratuitamente a los ricos, más propia de un Robin Hood, pero al revés.

Lo que ha ocurrido y está ocurriendo en España, en tan corto espacio de tiempo, es pues tan totalmente INCREIBLE pero no por eso menos cierto, por lo penoso de la situación de tantos millones de españoles que han y sufrido y seguirán sufriendo, ¡aún por mucho tiempo!, el mayor de los innecesarios quebrantos y gracias a que, un nefasto, día se animaron de buena fe a creer en mentirosas promesas otorgando su confianza, por mayoría absoluta, a unos desalmados que, disfrazados de demócratas y con apariencias de POPULARES, ¡nada menos!, fueron capaces falazmente de crear la mayor de las asociaciones de corruptos y ladrones para desamortizar con facilidad, nocturnidad y alevosía, lo que era el bienestar de todos los ciudadanos, que tanto sacrificio y sudor costó conseguir al noble pueblo español, amparados por unas leyes derivadas de una Constitución que, cuestionables Instituciones, se encargan de interpretar a su gusto y que permiten, por este motivo, perpetrar las mayores injusticias y latrocinios impunemente.
©Manuel Guzmán 2015

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