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jueves, 20 de noviembre de 2014

LA LOLA SE FUE A LOS PUERTOS (Brisbane en Australia)




Con esta licencia folklórico-titular me he permitido plantear una cuestión para tratar de descubrir realmente ¿a qué, este no menos folklórico Presidente del Gobierno de España, fue tan lejos?
Es la interrogante que, con todo derecho, podemos plantearnos los ciudadanos españoles cuando, con ocasión de su visita como invitado ¡nada menos! que del G20, nos asombramos sospechosamente de la enorme deferencia que supone el hecho de que, un dirigente político de la escasa talla de Rajoy, vaya tan lejos y no sólo se le invite a tan importante foro sino que, ¡además!, se le conceda el honor de pronunciar el discurso inaugural.
Un hecho del que, a tantos kms. de distancia a los españoles, paradójicamente, en vez de llenarnos de orgullo, más bien nos induce a sorpresa al mismo tiempo que, también, a no pocas sospechas porque, sin más remedio, por la poca fiabilidad que nos ofrece este personaje político, dada su fama de mentiroso, necesariamente hemos de colegir que aquí hay “gato encerrao” ya que, tanto jaboncillo dispensado por estos acaparadores magnates, tiene que responder a agradecimientos y tejemanejes ocultos que, en España, no son fáciles de explicar porque ¡jamás! podremos los ciudadanos llegar a creer que se pueda premiar, aplaudiendo de semejante manera, las medidas de gestión del gobierno español de una economía como la nuestra arrastrada a la crisis premeditadamente y que, además, en tan sólo tres años de su puesta en marcha, ha conseguido sumir en los umbrales de la pobreza a más de doce millones de españoles; setecientos mil de los cuales carentes en absoluto de prestaciones y, casi, cinco millones sin trabajo de los que, muchos cientos de miles, corresponden a una juventud sin porvenir y sin esperanzas que, con plenitud de formación, han tenido que acudir a la penosa emigración por cientos llegando, en este ranking de desaciertos y despropósitos, a conseguir el segundo puesto de Europa en malnutrición y pobreza infantil.

Irrefutables razones que nos llevan a seguir ahondando en este teatrillo al que el Sr. Rajoy nos tiene más que acostumbrados y que culminan en estas jornadas festivo-ricachonas donde, a careta quitada, se ha atrevido a “largar” por su boca, con cierto autobombo, unos supuestos logros económicos (conseguidos con el esfuerzo y el sudor del pueblo español exclusivamente) aplicando, sin rechistar y subordinadamente, las criminales y neoliberales medidas económicas que, dictadas por la célebre “troika” desde Bruselas, nos ha retrotraído a los ciudadanos de España a niveles desconocidos en muchos años y que, por desgracia, a los que tenemos cierta edad, nos ha hecho recordar los padecimientos de una cruel posguerra llena de hambruna y miseria.

A esto y no a otros méritos, se han referido los ricachones del mundo al premiar a Rajoy con tales distinciones que no podemos asumir los españoles de ninguna manera ya que, en este sujeto, han encontrado el “minguito” más formidable para convertir a España en el laboratorio experimental de todas las neo-liberales técnicas económicas, que hacen más permisible lo que, moralmente hablando es el delictivo compendio de todos los egoísmos que arrastran a los pueblos a la miseria sin remedio porque, estos ricos sin escrúpulos, lo único que desean y entienden, es seguir acrecentando absurdamente sus cuentas de resultados, porque no quieren oír hablar de apretarse cinturones ni de equidad con una más justa distribución de los riqueza que, en este planeta, va siendo cada vez más decantada en escasas manos. atentando contra la supervivencia de la humanidad.

Finalmente hay que poner de manifiesto que, a la vista de los resultados del supuesto y autocacareado éxito en la “salida” de la crisis económica de nuestro país, sólo en la mente de estos vendidos del PP, con la ingenuidad e ineptitud de Rajoy a la cabeza, se puede concebir una tan gran mentira porque el latrocinio por ellos perpetrado en los bienes producidos por la laboriosidad colectiva de todos los españoles, es la triste y severa realidad que nos habla, a las claras, de que habrán de pasar muchos años para que se borren las huellas del expolio que ha sufrido España en tan poco tiempo y con tanta dosis de nocturnidad y alevosía puesto que, en al mundo, habrá pocos ejemplos semejantes de que un partido político gane, sólo con mentiras, CUAL VULGARES POPULISTAS, unas elecciones con un programa en el que no había ni una sola cosa para cumplir, salvo sacar de la crisis, ¡eso sí!, a los poderes fácticos financiero-especuladores que, a pesar de las tropelías cometidas en sus ansias, han sido rescatados con nuestro dinero, detrayéndolo del bienestar que los españoles supimos darnos y con las consecuencias que todos hemos experimentando, al tener que ver cómo han fagocitado todos los recursos de este país, salvando sus pellejos y lanzando, al mismo tiempo, sobre la dignidad y entereza de los españoles, eso de que “hemos vivido por encima de nuestras posibilidades” y que, por tanto, nos merecíamos vivir como a ellos les ha dado la gana que viviéramos porque, esto que han hecho con tanta facilidad, fue la medida y premeditada acción de un gobierno vendido al dinero, con la triste agravante de haberlo hecho a sabiendas de que existían, en buena economía, otras soluciones menos traumáticas y eficaces para que, la sufrida y estoica población española, saliera de una crisis provocada y artificial, que no se merecía el verse despojada de su bienestar económico y social alcanzado con tanto sacrificio.
©Manuel Guzmán 2014         

lunes, 10 de noviembre de 2014

POPULAR y POPULISMO, dos palabras tergiversadas, ¿intencionadamente?



Durante los más de dos años que llevamos los españoles de buena voluntad soportando la pertinaz actuación y desgobierno de una derechona, ha quedado bien patente que, cómodamente instalada en el poder, al igual que antaño, con intrigante y criminal engaño y amparándose no sólo en una mayoría absoluta parlamentaria mal administrada descaradamente sino, además, en argumentos no justificables y sin escrúpulos, se ha revelado como la más montaraz, salvaje y analfabeta de cuantas formaciones se han denominado políticas en el panorama de nuestro país que a lo largo de nuestra historia nos han gobernado porque, como ha quedado demostrado, ¡hasta en el momento de poner nombre a su partido! han fallado estrepitosamente en eso de lo POPULAR, porque resulta un gran sarcasmo, a la vista de los resultados del desgobierno y sufrimientos por ellos conseguidos en España y en tan corto espacio de tiempo que, esta denominación, debería estar precedida del prefijo IM (impopular) pues, ¡a la vista están! :
  1. Los doce millones de españoles empobrecidos, setecientos mil en la pobreza absoluta; con los bancos de alimentos ya agotados junto a los más de cinco millones de parados de los que, sin prestación ninguna, se encuentran por miles y a los ciento de jóvenes que han tenido que emigrar; a los mayores de cincuenta años sin oportunidades ya y a los discapacitados sin ayudas junto a los cientos de niños que, sin conveniente alimentación, acuden acomplejados a las escuelas porque no han desayunado y, apenas consiguen una comida al día.
  1. El haber quitado a la palabra trabajo el sentido de la dignidad de que estaba revestida ya que han logrado poner patas arriba la legislación laboral al despojarla del sentido que tenía pues, abaratando el despido, haciendo que sea casi libre para aumentar escandalosamente la precariedad laboral hasta límites insospechados anteriormente, han rebajando los salarios y aumentando las jornadas, tras eliminar convenios con los trabajadores y conseguir un grosero festín para todos aquellos empresarios que, sin ética conocida ni escrúpulos, se han aprovechado del desmantelamiento de toda seguridad para los que, necesariamente, dependen de un salario, que dejó de ser digno instaurando, al mismo tiempo como necesarios, drásticos y seleccionados recortes en servicios de Bienestar, como la Sanidad y Educación para con alevosía privatizarlos, después de un alto grado de eficacia por ellos alcanzado, en beneficio solo de unos cuantos aprovechados.
    Argumentos, todos, que ponen de manifiesto el que, ¡para nada!, resulta POPULAR llevar el pomposo título que este partido político se ha otorgado a si mismo porque, su actuación en política, no coincide en absoluto con los significados de una palabra puesta en el título de una institución de gobernación que, en tan poco tiempo, ha arruinado a España y a millones de españoles al tergiversar también, con mala intención, la propia palabra de :

  2. a) POPULAR que significa perteneciente o relativo al pueblo,
    b) que está al alcance de los menos dotados económica y culturalmente hablando y
    c) que es estimado o, al menos, conocido por el pueblo.

      Conceptos todos que nos confirman la formidable y descomunal estafa que un partido denominado “Popular”, al presentarse a las urnas con este título y un programa que con tanto descaro y escándalo incumple ahora, solo porque fue modificado por su aplastante y absolutista mayoría en el Congreso de supuestos diputados, (“representantes del pueblo”, a los que los ingenuos españoles les otorgaron en las elecciones su confianza) pudiendo, de esta guisa, perpetrar sin impedimentos, todo lo contrario a lo que prometieron cosechando, además, en su gestión, altas cotas de corrupción en todas las Instituciones Públicas ya que fueron, con esta política tan dudosamente ética, desprotegidos de los corruptores empresarios y financieros, grandes sectores de las Administraciones que dieron lugar a un auténtico secuestro de la democracia, por grupos de estos desaprensivos que, corrompiendo a políticos, los volvieron irresponsables, ineptos y corruptos y que, gracias a militar en las filas del PP, se pudieron forrar atrincherados en todos los rincones de la, por ellos, dominada Administración, creando desesperanza y desconcierto general en una atormentada ciudadanía.
      Hechos , hasta aquí, que han dado origen a un movimiento cívico que, capaz de poner en entredicho todo un periodo histórico denominado TRANSICION, ha permitido la formación de un sistema corrupto de gobierno con alternancias de poder bipartidistas que, con todas las corruptelas aumentadas, ha generado pobreza y desesperanza pero que, gracias al formidable temple de este pueblo español se va a ir pronto al garete porque ha nacido, en el horizonte político, un prometedor movimiento de ejemplares ciudadanos españoles, curtidos en el 15M que, honestamente y de buena voluntad, cultos y preparados, van a ser capaces de devolverle al pueblo la voz y la ilusión perdida en la política , rechazando y reparando esta barbaridad económico-política perpetrada por demócratas disfrazados del PP, que se han permitido, después de robar a manos llenas, acusar de populistas (sin saber lo que realmente significa esto) a adversarios políticos que nos van a conducir, pese al que le pese, a la salida de la ruina generalizada y a la miseria a la que nos han arrastrado a millones de españoles.
      Como no podía ser de otra manera, esta joven y fuerte reacción, exigiendo un general relevo generacional está consiguiendo demostrar que, los ciudadanos, en torno a la muy fiable fórmula PORQUE PODEMOS, estamos en condiciones de encontrar otras formas de eficacia y regeneración política en un buen gobierno democrático, para salir de esta crisis y solo con exigir, por ejemplo, a las cinco familias que tienen en su poder toda la riqueza de esta país, que contribuyan a superar esta época de crisis, como deben, desembolsando a la Hacienda Pública, todos los impuestos que les corresponden por Justicia pagar,en vez de evadir, como vulgares defraudadores, sus beneficios a paraísos fiscales, haciendo gala de un incalificable y punible egoísmo.
      Un PODEMOS expresado por, cada vez, mayor número de españoles convencidos de que, participando en política, como nos corresponde, conseguiremos levantarnos y salir de este cerco al que nos han sometido falsos demócratas que, atentos más a sus prebendas y necesidades, ciegos, no han tenido, escrúpulos de ninguna clase al crear un bipartidismo provechoso para todo aquel que, entrando en política, de esta forma no ha tenido ningún impedimento para forrarse con una sorprendente y absoluta impunidad; creando desánimo en el conjunto de una martirizada sociedad española que atónita y asustada está oyendo ahora, con gran esperanza, las voces de una juventud, bien preparada y culta que, pidiendo el paso generacional, convertida en fuerza política, tiene todas las posibilidades para devolver el bienestar y la tranquilidad perdida a este pueblo, trabajador y sufrido, que no puede consentir el que, un tan gran movimiento espontáneo, sea tildado, injustamente y tan a la ligera de POPULISTA por unos ignorantes analfabetos, adocenados por el poder en un Gobierno Impopular, tan aprovechados e incultos que , ni siquiera, se pararon a descubrir lo que significa esta palabra para insultar y descalificar, tan a la ligera y alegremente, a un movimiento ciudadano, emergente y en alza, en el panorama español como PODEMOS, tratando de aplicarlo inadecuada y peyorativamente, a este gran grupo de españoles que solo pretenden instaurar el participativo gobierno de la gente, por la gente y para la gente que es lo que verdadera y esencialmente significa la palabra populismo, como muy bien definió el gran Abraham Lincoln.
      El único sistema sensato y legítimo que, democrática y participativamente ejercido, le puede devolver a España su destino no sometida, como está ocurriendo ahora mismo, a poderes y fórmulas económico financieras extrañas de extranjeros que, con la ayuda de estos irresponsables gobiernos que tenemos, amparados en una falacia democrática, nos están convirtiendo en súbditos y no ciudadanos, sometidos y explotados con facilidad y sin contemplaciones, para transformarnos en un país de servicios y en parias de una Europa para que, sus dominantes Estados del Norte, sigan detentando toda la riqueza del continente.

      ©Manuel Guzmán 2014

            

miércoles, 5 de noviembre de 2014

Cuestión catalana: 9N



Como español, nacido en las regiones periféricas de nuestra península, asombrado, preocupado e indignado quiero dirigirme, con este humilde escrito, a todos los españoles de buena voluntad que, probablemente, intoxicados, como yo, por la fuerte campaña mediático-política dirigida desde los centros del poder gubernamental del país en Madrid, con inexactitudes y mentiras, tan machacona y torticeramente dirigidas contra la nación catalana, hayan podido llegar a pensar que este noble pueblo, al reclamar su legítimo derecho a decidir el 9N su futuro, está atentando contra lo que estos politicastros españolistas han denominado “Constitución”. Un documento pergeñado y apañado en un periodo difícil y lleno de obscurantismos, en beneficio de los de siempre, con fuertes lagunas que han venido a poner de manifiesto, ahora, que es un mero cuento eso de que la soberanía reside en el pueblo.

Una aseveración que resulta fácil de explicar cuando no hace falta esforzarse mucho para darnos cuenta de que, a la vista de las actuaciones de esas supuestas formaciones políticas, llamadas partidos democráticos, los que conocimos desde su comienzo el franquismo, en muy poco las podemos diferenciar de las de aquel dictatorial montaje de partido único pues, en eso que ahora denominan Parlamento (antes Cortes Españolas) es un hecho el que, por ejemplo, la mayoría absoluta que tiene el PP, consigue los mismos resultados a los que el dictador Franco llegaba por aclamación, sacando adelante leyes contrarias a los intereses de la mayoría de los españoles con la paradoja de que, ahora, estos diputados, se autodenominan “representantes” del pueblo. ¿De qué pueblo?, podríamos preguntarnos.

Estamos, al cabo de más de tres décadas de supuesta andadura democrática, comprobando la tremenda estafa que, para todos los españoles de buena voluntad ha supuesto este formidable tinglado político que se empeñan en seguir llamando democracia y que dista bastante, aun, de que se le pueda seguir reconociendo tal caracter porque está poniéndose de manifiesto, ya a las claras, de que en España es muy fácil secuestrar la voluntad popular mediante el tinglado de unas elecciones que, manipuladas mediáticamente, hacen que, el egoísmo de los poderosos, siga siendo la lacra de este país, con el resultado del enriquecimiento injusto de unos pocos a costa del sufrimiento de la inmensa mayoría del pueblo español.

Eso que tan pomposamente estos individuos sin escrúpulos, beneficiados de la política, denominan CARTA MAGNA fue la patente de corso, el blindaje para que los herederos del franquismo así como sus alevines pudieran, en este país, seguir disfrutando de toda clase de prebendas, haciendo y deshaciendo a su antojo, bien situados y atrincherados en todas las instituciones del Estado que, a duras penas, están resultando democráticas porque, desde la Justicia, pasando por todos los estamentos de la Administración, vemos que la corrupción y toda la delincuencia por ella propiciada, se ha enseñoreado de las mismos haciendo que, desde los más bajos hasta los más altos, parezcan cortijos cerrados que sólo funcionan a sus instancias y para sus provechos.

De esta guisa ¿cómo es posible que el pueblo catalán no pueda expresar su voluntad de decidir su futuro? La respuesta está en que tan solo porque un Tribunal, como el Supremo, formado antidemocráticamente y compuesto por esbirros y “estómagos agradecidos”, nombrados por los partidos se irrogan, cual endiosados, la única interpretación posible de esa Constitución en la que, como está quedando claro, la voluntad popular no cuenta para nada a pesar de que, como en este caso que me ocupa, sea de justicia el dar al pueblo catalán la posibilidad de expresar votando, su voluntad afirmativa de gran pueblo, con unas señas de identidad difíciles de superar en toda la península Ibérica, porque han topado con el borreguismo político y el analfabetismo de una clase política madrileña que desconoce el significado de Cataluña como entidad nacional indiscutible, ¡nada menos! que desde el siglo IX, cuando los condados independientes de Cataluña, capitaneados por Vifredo el Velloso, se independizan de los francos y alcanzan un indiscutible y alto índice cultural y económico con el Monasterio de Sta. María de Ripoll como grandioso y activísimo foco de difusión de la tradición latino eclesiástica isidoriana, reforzada por aportaciones de la ciencia greco-oriental a través de la cultura arabigo-española al traer de Córdoba tratados astronómico-geométricos.

Un indiscutible mérito que señala una gran diferencia con el resto de los territorios peninsulares que continua, a través de varios siglos, con el desarrollo de toda una hegemonía mediterránea que dio días de gloria a la monarquía catalano-aragonesa, cuando se pudo considerar al Mediterráneo un mar catalán con grandiosa escuadra y famosos almogávares, protagonistas de acciones tan notables en el exterior, como la de Atenas, para que se hiciera sonada la venganza catalana con Roger de Flor.

Un pueblo noble y esforzado con fuerte y definida personalidad, que los españoles no podemos dejar de tener en cuenta a la hora de considerar lo que el gobierno de Madrid, del Partido Popular, está tratando de perpetrar sin razón y por la fuerza bruta exclusivamente, ya que no se puede sostener históricamente ni, ¡mucho menos! que, a la vista del comportamiento del desgraciado gobierno del PP que tenemos, con tantas actuaciones que van en contra de los intereses de una ciudadanía tan madura y laboriosa como la catalana, se perpetúe un atentado tan grave como el de impedir que, este gran pueblo, tenga la posibilidad de decidir su propio futuro en pos de su mejor desarrollo y a sabiendas de que la prosperidad alcanzada afectaría, muy positivamente, al resto de los pueblos de España puesto que sabríamos celebrar, junto a ellos, que fueran tan independientes...., como para que pudieran elegir en libertad su mejor destino y nos alcanzara a todos los habitantes de este maltrecho país, como se ha puesto de manifiesto siempre con todo lo bueno que, desde la Cataluña eterna, ha alcanzado siempre al resto de los territorios españoles.          
©Manuel Guzmán 2014